El rugido del motor se apagó, Raúl recogió del interior del vehículo sus pertenencias y su mirada se detuvo un instante en el piloto de la reserva de gasolina, que se se mantenía encendido desde hacía ya varios días. Con decisión y en un caminar en busca de confianza, fue acercándose esperanzadamente a la puerta de aquella nave de la fábrica ubicada en un polígono industrial a las afueras de Madrid.
Letras Liberadas
Espacio dedicado a la literatura
miércoles, 29 de junio de 2022
Entradas al amor
Es viernes y como todos los días a las siete de la mañana, Roberto está sentado junto a la ventana del tercer vagón de tren que conecta las afueras de Madrid (dónde vivía en un piso) con Sol, camino al trabajo. Vestía con traje, aunque apoyaba la americana en sus rodillas. Es contable en una oficina de seguros. A dos paradas del destino, coincidía con Alberto, uno de los comerciales de la compañía.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
Primero fueron los principios
El rugido del motor se apagó, Raúl recogió del interior del vehículo sus pertenencias y su mirada se detuvo un instante en el piloto ...
-
Es viernes y como todos los días a las siete de la mañana, Roberto está sentado junto a la ventana del tercer vagón de tren que conecta...
-
El rugido del motor se apagó, Raúl recogió del interior del vehículo sus pertenencias y su mirada se detuvo un instante en el piloto ...